El Consejo de la Unión Europea adopto el pasado mes de diciembre un reglamento que busca reducir significativamente los residuos de envases mediante objetivos vinculantes de reutilización, restricciones a envases de un solo uso y requisitos para minimizar su peso y volumen.
Las nuevas normas, que se aplicarán 18 meses después de su entrada en vigor, incluyen metas de contenido reciclado (hasta un 65% para botellas de plástico en 2040) y limitaciones a envases plásticos para frutas, cosméticos y alimentos en sectores como la hostelería.
El reglamento promueve la reutilización, exigiendo a negocios de comida para llevar que permitan a los clientes usar sus propios recipientes sin coste adicional.