El 29 de abril, el Consejo ha adoptado hoy la Ley de Infraestructuras de Gigabit, que sustituirá a la Directiva de reducción de costes de banda ancha de 2014.
El objeitvo es simplificar y acelerar el despliegue de redes de alta velocidad, como la fibra y la 5G, con vistas a alcanzar los objetivos y metas de conectividad de Europa establecidos en la brújula digital para esta década